Lejos de parecerse al resto de casos de impago de una vivienda, la familia Cassà Pérez no será desahuciada. La justicia ha decidido que, a pesar de que hace años que no pueden hacer frente a la hipoteca -una multidivisa con la que batallan desde el 2012-, esta familia de Badalona ( Barcelona ) podrá quedarse en el piso que compraron, sin pagar ninguna cuota como al menos durante cuatro años más, hasta el 2024. Así lo dice una sentencia del juzgado de primera instancia número 2 de Badalona. "Son cuatro años en los que podremos respirar y reponernos de todo", avanza Òscar Cassà, el padre de familia.
La decisión del juez ha tenido en cuenta los argumentos de la familia, que se ha acogido a un artículo "poco recordado" de una ley de 2013 que regula "medidas para reforzar la protección de los deudores hipotecarios".
"Se trata de un artículo y una ley que ahora ya podríamos decir que son antiguos, porque tienen siete años, pero en ese momento nos sirvieron para paralizar muchos desahucios", explica Núria Vilarnau, abogada del Colectivo Ronda experta en vivienda y que ha llevado el caso de esta familia. "Los jueces sí hacen caso a esta norma porque es una ley española vigente que se creó a raíz de las cláusulas abusivas de la banca, que también dejaron mucha gente en la calle".
La norma de 2013 determina en uno de sus artículos que ninguna familia con una vulnerabilidad acreditada puede ser desahuciada por razones de impago hipotecario. Además, añade que aunque el piso acabe cambiando de propietarios (por ejemplo, si pasa a manos del banco y después a manos de un fondo de inversión) el derecho de la familia no se ve alterado, explica la abogada. "Es un artículo muy importante que puede ayudar a muchas familias y, en cambio, tenemos la sensación de que ha quedado olvidado", dice Vilarnau. "Con esta herramienta se podrían detener muchos desahucios injustos, pero creo que simplemente no pensamos que existe; y la justicia es rogada, se debe pedir! ", insiste.
Inicialmente, la norma de 2013 se previó para una duración de cuatro años. Después se prorrogó cuatro años más y, ahora -la norma caducaba en mayo - la crisis del coronavirus ha hecho que se vuelvan a alargar los plazos hasta el 2024, explica la abogada. "Este artículo, por lo tanto, se puede seguir aplicando y los juzgados la aceptan porque, en su momento, hubo muchas sentencias favorables", defiende la abogada. "Pero la gente no lo sabe, eso, y no piden la prórroga; si lo hicieran se asegurarían la vivienda hasta el 2024, sin tener que pagar cuotas de hipoteca ni tampoco ningún alquiler social ", subraya.
En este contexto, con una nueva crisis abierta a raíz del coronavirus, ganar cuatro años de oxígeno hipotecario supone "un mundo" para familias como los Cassà Pérez, y les da un "margen suficiente" para recuperarse del bache sin angustia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario